No es novedad que actualmente los adolescentes pasan mucho de su tiempo viendo televisión, videos, películas o jugando video juegos, sin embargo, lo que sí es de sorprender es el tiempo que dedican a estas actividades pues normalmente pasan entre siete y nueve horas frente al a algún aparato electrónico, según un estudio realizado en el 2018 por La Asociación de Internet.mx, incluyendo la utilización de aplicaciones con mensajería instantánea y tomando en cuenta que un adolescente tiene actividades como el colegio, hobbies, tarea, entre algunas particulares. Con ese preámbulo consideremos que estamos en tiempos de confinamiento, sin actividades escolares presenciales, aumentando entonces las horas frente a un televisor o un computador pensando que reciben las clases educativas por este medio. Sin embargo, lo que viene a ser realmente significativo es el uso de redes sociales, televisión o video juegos como se mencionó en un inicio debido a la no suficiente observación por parte de las figuras de autoridad y/u ocio y claro, el tiempo que se dedica al mismo.
Veamos entonces cuáles son las ventajas tanto como las desventajas de que nuestro adolescente realice tanto uso de la tecnología.
Algunas ventajas lo son:
• La comunicación traspasa fronteras, esto es se puede establecer comunicación a cualquier parte del mundo.
• La socialización es más sencilla ya que en ocasiones la presencia de algunas personas podría representar la restricción para que los adolescentes puedan expresarse libremente, por otro lado, siendo tantos usuarios de redes sociales existe un “cierto anonimato” y eso hace más fácil expresarse.
• Mejoras en el aprendizaje, cientos de cursos y plataformas en tiempo real para poder compartir y adquirir conocimientos.
• Tecnología como entretenimiento, libros y revistas virtuales, películas y series, música y conciertos entre algunos otros se encuentran a un alcance más cómodo.
En otro sentido las desventajas son:
• Interrupción con otro tipo de actividades como el colegio, los deportes y la socialización presencial.
• Nula privacidad e indebido uso de datos personales dejando al descubierto a través de redes sociales información sensible de los adolescentes mismos o de su familia.
• Demasiada información en la red, si bien es muy fácil utilizar el navegador para investigaciones lo es perjudicial cuando de una noticia pasamos a otra y a otra, en ocasiones no encontramos información concreta, lo que se convierte en mayor tiempo invertido.
• Información inapropiada, los contenidos muchas veces no son los adecuados, en ocasiones no se tiene la capacidad necesaria para digerirlos, algunos pueden ser no confiables y no verificados; en sus lectores o espectadores influye en la forma de percibir el mundo que los rodea.
• El aislamiento social y el retraso en el desarrollo de habilidades sociales se encuentra favorecido debido a pasar tiempo con la tecnología y no con las personas de manera presencial, dichas habilidades son de suma importancia para su realización en la vida.
• Vías para el acoso debido a que algunos perfiles de redes sociales pueden permanecer en el anonimato, dando paso al ciberbullying y el grooming (acciones deliberadas por un adulto para ganarse la confianza de un menor de edad).
• Dificultades para dormir, sedentarismo y sobrepeso se unen a estar tanto tiempo usando aparatos electrónicos, lo que más adelante se convertirá en una adicción a la tecnología y sus múltiples usos.
Hasta ahora entendemos las desventajas como algo más representativo que las ventajas, con lo anterior no hago referencia a anular las actividades virtuales, sino limitar su uso. Así que a continuación sugiero algunas maneras de poder hacerlo:
Toda prevención es sumamente importante, estableciendo horarios y reglas en cuanto al uso. Sin embargo, en muchas otras ocasiones no se realizó por falta de presencia parental u otros factores entonces lo que aquí debemos hacer es establecer bien los roles de padre y madre, dejarlo en claro. Lo segundo es establecer acuerdos con los adolescentes, considerando que no debemos ceder por completo a lo que en un primer momento el adolescente sugiera, aunado a ello debemos tener conocimiento del uso de internet para poder establecer normas justas.
Lo recomendable que como padres de adolescentes podemos hacer es conocer el contenido al que están expuestos y utilizar de manera productiva el contenido, con ello podemos incluir el bloqueo de páginas web y sobre todo ofrecer consejos acerca de denotaciones de violencia, amenaza o intimidación recibidos hacia los adolescentes y hacerles ver el peligro que puede conllevar compartir información personal.
Cuando se haya establecido un horario, como padre o tutor puedes preguntar al adolescente qué está haciendo, pasar frente a él o entrar a la habitación sin invadir su privacidad y ver en la pantalla que efectivamente no este haciendo un mal uso del internet, esto hacerlo constanetmente para estar monitoreando que tipo de contenido y/o actividad está realizando.
En estos momentos de confinamiento y exceso de “tiempo libre” es un área excelente de oportunidad para establecer y realizar acuerdos acerca del uso de la tecnología.
Recuadro: La página “Oficina de Seguridad del Internauta” dicta información confiable acerca del uso de internet, además, cuenta con una sección llamada “Internet Segura for Kids” la cual ofrece recursos para padres y educadores.