Los niños en clases presenciales, ¿Qué seguridad te ofrece la escuela para la prevención de contagios?

Además de los planes de seguridad en las escuelas , existen otros factores que las comunidades escolares deben abordar:

Estudiantes con mayor riesgo. Algunos estudiantes con afecciones médicas crónicas y de alto riesgo pueden necesitar adaptaciones adicionales para mantenerse a salvo. Hable con su pediatra y el personal de la escuela (incluídos los enfermeros escolares) para explorar las opciones para el regreso a la escuela, ya sea de manera presencial, combinada o remota.

Estudiantes con discapacidades. Los planes de reapertura de las escuelas pueden tener un mayor impacto en los estudiantes con discapacidades. La transición de regreso al aprendizaje presencial puede ser difícil después de haber perdido tanto tiempo de instrucción. O quizás hayan tenido menos acceso a los servicios escolares, como la terapia ocupacional, la fisioterapia y la terapia del habla y el lenguaje, o el asesoramiento de apoyo para la salud mental. Las escuelas deben revisar las necesidades de cada niño con un programa de educación indi​vidualizada (IEP) antes de que vuelvan a la escuela y proporcionar los servicios necesarios, aunque sea de manera virtual.

Vacunas, exámenes físicos. Es especialmente importante que los estudiantes estén al d​​ía con sus vacunas, incluida la vacuna contra la gripe, durante la pandemia. Los médicos notaron una caída en la aplicación de las vacunas infantiles de rutina durante la pandemia. Ponerse al día evitará brotes de otras enfermedades que podrían hacer que los niños no vayan a la escuela.

Salud conductual/apoyo emocional. La escuela de su hijo debe estar preparada para apoyar una amplia gama de necesidades de salud mental durante la pandemia. Esto incluye el reconocimiento de signos de ansiedad o angustia. Los estudiantes pueden estar haciendo el duelo por la pérdida de sus seres queridos a causa del COVID-19, por ejemplo, o sintiendo el estrés de la pérdida de ingresos familiares. Estados Unidos ha tenido más de 600,000 muertes por COVID-19. En promedio, cada una de estas muertes afecta a nueve personas, y muchos de estos 4,5 millones de personas en duelo son niños. Las escuelas pueden ayudar a los estudiantes con pensamientos o comportamientos suicidas a obtener el apoyo que necesitan.

Actividades organizadas. Los eventos deportivos, las prácticas y otras actividades extracurriculares pueden estar limitados en muchas áreas. En las escuelas que sí ofrezcan deportes y otras actividades físicas, se deben tener en cuenta medidas especiales de seguridad.

Evaluaciones de detección. Las evaluaciones de visión y audición deben continuar en las escuelas, cuando sea posible. Estos servicios ayudan a identificar a los niños que necesitan tratamiento lo antes posible y evitan la interferencia con el aprendizaje.

Nutrición. Muchos estudiantes reciben comidas saludables a través de los programas de comidas escolares. Es posible que haya más estudiantes que sean elegibles para recibir comidas gratuitas o de precio reducido que antes de la pandemia. Las escuelas deben brindar los programas de comidas incluso si la escuela cierra o el estudiante está enfermo y se queda en su casa.

¿Por qué la escuela presencial es mejor (cuando es segura)?

Las escuelas brindan más que solo el aprendizaje académico a los niños y adolescentes. Además de leer, escribir y matemáticas, los estudiantes aprenden habilidades sociales y emocionales, hacen ejercicio y tienen acceso a servicios de salud mental y otros servicios de apoyo. Para muchas familias, las escuelas son lugares donde los niños reciben comidas saludables, acceso a Internet y otros servicios vitales.

La pandemia ha sido especialmente dura para los niños con discapacidades, los niños que viven en la pobreza y los niños negros, hispanos/latinos e indígenas estadounidenses/nativos de Alaska. En una encuesta de abril de 2020, más de la mitad (59%) de los padres con ingresos más bajos que tenían hijos en escuelas remotas debido a la pandemia dijeron que sus hijos probablemente enfrentarían al menos uno de los tres obstáculos para el aprendizaje digital: falta de Internet confiable en casa, por ejemplo, no tener computadora en casa, o necesitar usar un teléfono inteligente para completar el trabajo escolar. Ya sea que los planes de aprendizaje avancen en persona o no, las escuelas necesitan financiación para poder brindar una educación segura y eficaz para todos los estudiantes.

Recuerde… Al trabajar juntos, las familias, las e​scuelas y las comunidades pueden ayudar a garantizar que los estudiantes puedan regresar de manera segura y garantizar la presencialidad en la escuela.

Por Rebeca Borgaro Payro/ Pediatra/ Mail: becky.borgaro@gmail.com