Por Susana Morales Aguilar / Psicóloga
En artículos anteriores abordamos temas como el uso de pantallas en menores de edad y por este punto iniciare. Los niños y los adolescentes están creciendo inmersos en los dispositivos digitales. Y están expuestos a estos en diferentes formas, tales como la televisión, los videojuegos, las computadoras, los teléfonos inteligentes y otras pantallas, además del acceso a redes sociales y videos. Es importante recordar que el uso de pantallas en menores, en primer punto, deberá ser permitido a partir de los nueves años (solo desarrollo escolar), y en adolescentes con restricciones especificas (a partir de los 11 años) para favorecer un desarrollo priorizado en el uso de las pantallas como herramienta de apoyo no como desarrollo de crianza.

Todos los seres humanos desarrollamos “apegos, comportamientos, dependencias”, y eso será a medida de como se desarrolle nuestra crianza y vínculos; sin embargo, el uso de redes sociales antes de los 19 años (donde se alcanza una conciencia de riesgos y experiencias de autocuidado) se muestras con más focos rojos e influencias negativas para el desarrollo emocional, afectivo, social y biológico de nuestros hijos.
Los medios de comunicación pueden influenciar a los niños y a los adolescentes e impactar en su bienestar, la forma en que aprenden, piensan y se comportan. El uso de redes sociales en menores entre los sies a los 14 años, marca una variable de riesgos, como ciberacoso, ciberbullyng, desarrollo de falta de control de impulsos y dependencia a videojuegos. En estas edades y en la evolución escolar que hemos vivido postpandemia, psicólogos educativos refieren que el uso de “TIC´S siempre debe ser vigilado y supervisado, teniendo objetivos claros de desarrollo intelectual .
La influencia positiva de el uso de redes sociales (repito con supervisión y seguimiento de un adulto), permite:
- Permitirle a los usuarios el desarrollo de nuevas ideas e información (cuestionar, debatir).
- Sensibilizar y permitir el desarrollo sobre temas y eventos actuales.
- Promover la participación comunitaria.
- Ayudar a los estudiantes a tener información especifica, completa y concreta como apoyo en su desarrollo escolar.
- Rompe barreras de comunicación, y permite la comunicación a distancia.
- Mejoran el acceso a valiosas redes de apoyo, especialmente para personas con enfermedades o discapacidades.
- Ayudan a motivar el bienestar y los comportamientos saludables, como dejar de fumar, hacer ejercicio o comer sano.

Las influencias negativas del uso de redes sociales en menores son:
- Problemas del sueño: El consumo de pantallas puede interferir con el sueño. Los niños y adolescentes que pasan más tiempo en las redes sociales o que duermen con los dispositivos móviles en sus habitaciones tienen mayor riesgo de tener problemas del sueño. Incluso los bebés pueden verse sobreestimulados por las pantallas y perder el sueño que necesitan para crecer.
- Obesidad: El uso excesivo de pantallas, así como el tener un televisor en la habitación, pueden aumentar el riesgo de la obesidad debido a desarrollo de ansiedad o apego ansioso. La publicidad de alimentos y bocadillos (snacks) mientras se ve la televisión pueden promover la obesidad. Además, los niños que abusan de las pantallas son menos propensos a estar activos con juegos físicos saludables.
- Retrasos en el aprendizaje y habilidades sociales: Cuando los bebés o niños en edad preescolar ven demasiada televisión, pueden mostrar retrasos en la atención, el pensamiento, el lenguaje y las habilidades sociales. Una de las razones de esto podría ser que no interactúan tanto con sus padres y familiares. Los padres que mantienen la televisión encendida o pasan demasiado tiempo con sus propios dispositivos digitales pierden valiosas oportunidades de interactuar con sus hijos y ayudarlos a aprender.
- Efecto negativo en el desempeño escolar. Los niños y los adolescentes con frecuencia consumen contenidos de entretenimiento al mismo tiempo que hacen otras cosas, como las tareas escolares. Hacer varias cosas a la vez puede tener efectos negativos en la escuela.
- Problemas de conducta. El contenido violento en la televisión y las pantallas puede contribuir a problemas de comportamiento en los niños, ya sea porque lo que ven los asusta o confunde o porque intentan imitar a los personajes de la pantalla.
- Uso problemático de internet. Los niños que pasan demasiado tiempo usando las pantallas y consumiendo contenido digital pueden estar en riesgo de un tipo de comportamiento adictivo llamado uso problemático de Internet. Los jugadores de videojuegos corren el riesgo de sufrir un trastorno derivado del uso excesivo de videojuegos. Pasan la mayor parte de su tiempo libre en línea y muestran menos interés en las relaciones fuera de línea o de la vida real. Pueden existir mayores riesgos de depresión tanto en el extremo alto como en el bajo del uso de internet.
- Conductas de riesgo. Los contenidos de los adolescentes en redes sociales a menudo muestran comportamientos de riesgo como el uso de sustancias, actividad sexual, autolesiones o trastornos alimentarios. La exposición temprana de los adolescentes al alcohol, el consumo de tabaco o comportamientos sexuales en las pantallas está relacionada con la participación más temprana en estos tipo de comportamientos.
- El «sexteo», la privacidad y los predadores sexuales. El «sexteo» es la práctica de enviar imágenes desnudas o semidesnudas, así como mensajes de texto explícitos usando un teléfono inteligente, computadora, tableta, videojuego o cámara digital.
- Acoso cibernético. Los niños y los adolescentes en línea pueden ser víctimas del acoso cibernético. El acoso cibernético puede tener un efecto negativo a corto y largo plazo en la vida social, el desempeño académico y la salud a largo del acosador y la víctima.
En conclusión , como civilización es eminente y neceario que nuestros hijos tengan el acceso a fuentes de desarrollo eductivo y social , redes sociales, videojuegos son herramientas de apoyo para nosotros y nuestros hijos.
Contacto: FB: Cips Centro Integral Por la Salud